jueves, 1 de mayo de 2014

¡Inmenso Atlético!


Una emocionante actuación del Atlético tumbó a un miserable Chelsea en un segundo tiempo histórico y es el otro finalista de la UEFA Champions League. La final es española y el espectáculo está asegurado.


Tal vez ha sido el conjunto que más difícil lo ha tenido a lo largo de la competición, eliminando a equipos duros de roer como el Milan, Barcelona o Chelsea, rival que ridiculizó en su propio estadio. Con una forma de juego muy parecida a la de los londinenses, el Atlético fue más ambicioso y atrevido, confirmando que en ilusión nadie les gana. Los colchoneros tuvieron este miércoles, si no es la mejor, una de sus mejores noches desde que Simeone está a cargo como entrenador.

Pero no todo empezó de buena manera para los españoles aunque hayan gozado de las mejores ocasiones, porque el que fuese jugador del Atleti, Fernando Torres, remató un centro de Azpilicueta que se desvió en Mario Suárez y terminó despistando a Courtois para adelantar a los blues. No sirvió de mucho, porque los rojiblancos no arrugaron y tiraron de su archiconocida garra. Así fue como llegó la paridad al marcador. Al filo del descanso, Tiago, de enorme partido, lanzó un pase largo y preciso a los pies de un Juanfran que llegaba a la carrera tras ganarle la espalda a Hazard para centrar al segundo palo, justo donde llegaba un Adrián López que, con un disparo mordido, sorprendió al Stamford Bridge colocando el empate momentáneo. Así se fueron a los vestuarios.

Ya en el segundo tiempo, el Atleti dominó más el juego. A pesar de eso, Terry obligó al gran portero belga a lucirse en el 53' tras cabecear un peligrosísimo centro. Mou dio entrada a Samuel Eto'o y cuando el Chelsea “acechaba” el área de un Atleti bien parado, en la hora de juego, el delantero camerunés cometió, quizá, la falta más absurda de su carrera. Penal sobre Diego Costa y 1-2. Justicia por todos lados. Más aún cuando el crack turco, Arda Turan, marcó el 1-3 doce minutos después. Con esto sí enmudeció el estadio. Sobraron veinte minutos, donde Koke demostró su clase. Jugó un partido conmovedor, no para de evolucionar. Como dijo Xavi: “Él (Koke) tomará la batuta de la Selección Española”.

Los hinchas locales que habían asistido para ver una clasificación del equipo de Mourinho comenzaron a retirarse porque no habían opciones de remontada, porque el Chelsea no tiene argumentos para estos casos, o porque, simplemente, era la noche de los rojiblancos.

La final será en Lisboa este 24 de mayo. Ya vimos cómo Cristiano y compañía aplastaron en su visita a un Bayern que será el campeón hasta el día del partido, porque no podrá defender su corona. Son justos finalistas los dos y el favorito es, claramente, el Real Madrid, pero los partidos se juegan y no se ganan hasta que el árbitro pite el final del encuentro. Y en los noventa minutos, cualquier cosa puede pasar. Tal vez Ronaldo se sale con un triplete o el Atlético golea, que es más improbable. Esto es fútbol, el deporte más lindo del mundo.

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